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¿Eres consciente de que colchón y funda protectora siempre han de ir de la mano? En caso negativo, sigue leyendo porque en este nuevo post insistimos en la enorme necesidad de contar con un cubre colchón por una cuestión pura de higiene. Si tienes un negocio de hostelería, tus huéspedes agradecerán no solo taparse con una manta coralina suave al tacto y cálida, sino acostarse en una cama higienizada y libre de ácaros.


La funda protectora es un producto clave para mantener tus colchones en el mejor estado posible a lo largo de toda su vida útil. El cubre colchón los protege del polvo, la humedad y los ácaros. Por eso, no es solo algo beneficioso para el colchón, sino también para nuestra salud. Porque en Toallas a un Euro insistimos a nuestros clientes en que descansar con la mayor higiene posible repercute positivamente en la calidad del descanso y, a la larga, en la salud.

Qué tipo de protector utilizar

Es recomendable elegir protectores impermeables, que protejan la cama de cualquier líquido que se pueda verter. Este tipo de cubre colchón es todavía más necesario en el caso de personas mayores y niños. Por descontado, ha de ser  transpirable para permitir una correcta aireación. Para ello, el material del protector de colchón ha de ser de poro abierto.

La cuestión ahora es saber cuándo renovar el cubre colchón. Lo cierto es que no hay una durabilidad media, sino que se van renovando según su estado de conservación. Al protector de colchón, lógicamente hemos de sumar el de la almohada. Debe ser transpirable para dejar pasar el aire y el sudor además de resistente a ácaros y antialérgena. La funda dependerá del tipo de almohada (viscoelástica, de látex o de fibras).

La funda mejora las propiedades del colchón

Además de todas las ventajas que hemos ido viendo en las líneas anteriores, hay otra que no podemos pasar por alto. Nos referimos a que el cubre colchón alarga la vida útil de este. Hoy día, las fundas que podemos encontrar en el mercado en general y en nuestra tienda online en particular han ido sumando tratamientos y acolchados que mejoran exponencialmente la comodidad del colchón añadiéndole propiedades específicas. Distintos tejidos y composiciones que han supuesto un salto notable en la calidad de las fundas de colchón.